Yo he nacido en un valle de esta región "infinita" y la verdad es que mientras la necesidad no me llevó allende las montañas me parecía que difícilmente podría haber lugar en el mundo de geografía más afortunada. Recuerdo todavía los comentarios que hacíamos entre compañeros el día que nos dirigíamos en tren hacia Valladolid para examinarnos de Preuniversitario. Era principios de julio, hacía un calor como nunca habíamos conocido, el tren apenas avanzaba, la carbonilla se nos metía en los ojos y estábamos a punto de someternos al juicio de un tribunal de catedráticos de universidad. En las más de diez horas que duró el viaje dio para muchos chistes despectivos acerca de las doradas llanuras de Tierra de Campos. Así, supongo, tratábamos de distraer el disconfort, el tedio y, sobre todo, la preocupación que nos atenazaba el alma, porque sabíamos que no era fácil obtener un veredicto favorable. De hecho, en mi grupo de amigos más íntimos nos suspendieron a casi todos, lo que, a la postre, se tradujo en tener que pasar el verano lejos de nuestras verdes praderas.
Pues sí, aquel verano en Valladolid fue mi primer contacto con otras voces, profesores de verdad, y otros ámbitos, el secarral. Lo recuerdo como si fuera ayer. No fue mala experiencia. En septiembre pase la prueba con desahogo. En octubre volví a Valladolid a iniciar mis estudios universitarios. Aquello fue el comienzo de mi inquieto deambular por el mundo. Y no he necesitado recorrer muchos kilómetros ni, ni siquiera, cruzar océanos para conocer, por haberlas vivido, geografías muy diversas. Y les voy a hacer una confesión que a algunos les costará creer: en todas las partes en las que me demoré conocí a personas, Revillucas, por así decirlo, que estaban sumamente orgullosas de vivir en donde habían nacido, no por nada sino por considerar que su tierra era la más prometida del mundo.
Yo, ya lo he dicho muchas veces, lo del orgullo por algo que te ha sido dado lo considero cosa de perfectos idiotas. Être fier, to be proud, sentirse orgulloso, ¿de qué?, ¿de haber salido por el agujero en un lugar en vez de otro? Ya digo, cosa de idiotas. En todos los lados cuecen habas y con eso hay que vivir. Eso forma parte del aprendizaje de la vida. Y también que en cualquier sitio se puede estar bien y se puede estar mal. Hay muchos factores que influyen en ese sentido, empezando por los personales.
Desocupado, viejo, lluvia que no cesa, cuestas por todas las partes, horizontes cercanos, provincia, por un lado... por el otro... no sé, habrá que hacer balance.
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